Las plantas y los suplementos

Querido lector en esta ocasión expondremos los beneficios de consumir plantas medicinales en favor de la recuperación de la salud, durante mucho tiempo la herbolaria tradicional ha proporcionado la base curativa para tratar trastornos que aquejan al ser humano, es gracias a las plantas medicinales que el hombre ha podido subsistir en estas tierras durante miles de años. La era moderna nos habla de enfermedades clasificadas por códigos de acuerdo al impacto del daño que causan en cierto grupo de personas, que merman su salud e incluso puede causar la muerte, en el pasado no conocíamos esta clasificación de enfermedades, sólo sabíamos que el cuerpo enfermaba y que el daño que provocaba era posiblemente a la incapacidad de controlar nuestro comportamiento, disciplina, estar en desacuerdo con la divinidad o hasta creer que era por magia lo que hacía que nuestro cuerpo enfermaba.

En la herbolaria tradicional mexicana la percepción del origen de las enfermedades está muy relacionada con la naturaleza de las emociones cambiantes, es así como una persona puede enfermar si sus pensamientos son negativos, actualmente vemos que esa clasificación sigue siendo un patrón en la alteración del cuerpo humano, una persona que está triste puede debilitar las paredes del corazón, puede presentar dificultad para hacer la digestión, el estado de melancolía profusa puede hacer que la persona tenga pérdida del apetito y la persistencia lo lleve a perder peso.

Por otra parte la ira, el enojo, el coraje pude hacer que las personas presenten inflamación intestinal, dolor de estómago, dolor en el bajo vientre, inflamación del hígado, retención de líquidos, flatulencias, boca amarga, irritabilidad y nervios alterados que elevan la respiración, desencadena irregularidades en la presión arterial y por consiguiente merma de las capacidades funcionales.

También observamos cuando las personas sufren la pérdida de un ser querido, al ser amado o en algunos casos la pérdida de una mascota, se someten a un estado de melancolía, tristeza, angustia y desesperación que se relaciona fácilmente con problemas cardíacos, problemas respiratorios, baja presión arterial, dolor muscular, incapacidad para comunicarse o expresar su angustia y desesperación.

En el conocimiento ancestral el origen de las enfermedades del México antiguo, se describen algunas afecciones como el mal de ojo, el mal de espanto, el mal de aire, el mal de ascos, el mal de amores, se sabía que la presencia de un estado de alteración mental genera un desorden en la función de órganos y tejidos que difícilmente puede estabilizarse en una persona si no recibe el tratamiento adecuado.

Por otra parte se responsabiliza al origen de las enfermedades a lo que hoy conocemos como procesos invasivos, son conductas de afecciones que se le adjudica responsabilidad a la mordedura de un animal ponzoñoso, la picadura de algún insecto, la herida con algún objeto punzocortante, también puede venir una enfermedad por el contacto con algún objeto contaminado o infectado, en fin, la lista no termina si de alteraciones se trata, virus, bacterias, gérmenes, parásitos, venenos, toxinas, y sustancias químicas contaminantes que ingresan a nuestro organismo puede enfermarnos o provocarnos la muerte, durante mucho tiempo nuestro cuerpo ha enfrentado a un sinnúmero de agentes patógenos y contaminantes, entonces, ¿porque seguimos enfermando?, la conducta normal de nuestro cuerpo es mantenerse sano y esto es en gran medida a la presencia del sistema inmune que favorece la eliminación de agentes patógenos y contaminantes, de esta forma se mantienen la salud y la fortaleza de un cuerpo sano.

La alimentación desordenada, lo hábitos alimenticios desbalanceados, la falta de nutrientes estructurales, la alta concentración de azúcares, grasas transgénicas, harinas refinadas, alimentos curtidos, alimentos y bebidas que no aportan nutrientes a nuestro cuerpo especialmente los alimentos conocidos como chatarra, merma la capacidad de defensa del sistema inmune, incrementa el riesgo inflamatorio, dolor de cabeza, de espalda, pies o piernas, puede estar relacionado con la falta de nutrientes específicos, los cuadros de desnutrición son el mayor ejemplo de que la alimentación es importante a la hora del proceso de recuperación, una persona puede estar gordito o con sobrepeso pero esto no quiere decir que esté sano o que esté bien nutrido, por otra parte una persona con bajo peso en aparente estado de salud óptima pueda estar bien nutrido, a lo que me refiero es que la alimentación y nutrición, en términos pareciera ser lo mismo, pero no es así, por una parte la alimentación es la capacidad de administrar complejos alimenticios (carnes, grasas, frituras, bebidas refrescantes, cualquier cosa que se pueda comer o tomar) sin cuidar si son nutritivos, lo que buscamos es que nos quite el hambre y listo.

Por otro lado la nutrición es la respuesta al cuidado balanceado de alimentos que nos proporcionen grasas, azúcares, carbohidratos, proteínas, aminoácidos, vitaminas y minerales de alto valor nutricional lograrlo es muy fácil solo hay que incrementar la ingesta de (frutas, verduras, cereales, legumbres, olivas, bulbos, tubérculos, raíces, quelites, hongos, en si alimentos naturales), el problema está en que estos hábitos los queremos adoptar ya muy tarde, cuando nuestro cuerpo no tienen la capacidad de sintetizar y asimilar los nutrientes.

En el ejemplo más claro que hacen las personas con sobrepeso y obesidad es dejar de comer grasa, azúcares o carbohidratos y en lugar de bajar de peso suben más, otro ejemplo claro es en las personas que quieren controlar su glucosa en sangre y dejan de consumir azúcar, golosinas, chocolate, atole, frutas dulces y no lo logran, otro ejemplo también claro es en las personas que quieren dejar de fumar sin terapia alguna, estas empiezan a consumir cantidades de café al día, presentan mucho nerviosismo, estados intranquilos, palpitaciones cardíacas, desesperación, en fin a cualquier enfermedad puedo decirle que el daño ya está hecho y no hay forma de recuperarse solo cambiando los hábitos alimenticios.

Es cierto que si se estabiliza y empieza con un cambio en su alimentación puede retrasar la aparición de una nueva enfermedad. Para todo ello es necesario que empiece con un plan integral de su alimentación pero sobretodo de su capacidad nutrición al hasta obtener los resultados adecuados, el proceso de recuperación debe incluir un tratamiento herbolario con métodos de desintoxicación, protección, control, desparasitación, desinflación, en fin una fórmula magistral con plantas medicinales para tratar la afección que le aqueja, acompañada siempre de un plan integral de su nutrición (visite a su Nutriólogo de cabecera), si la afección que le aqueja es de reacción alta y comprometedora tendrá que estabilizarse y llevar a cabo una posible hospitalización (visite a su médico) hasta mermar la intensidad de su enfermedad y nuevamente apoyarse con un plan integral de nutrición y alimentación.

Bueno con el cuidado de la salud hay que hacer de todo, siempre recomiendo que mejore su alimentación, si por alguna razón no puede, use suplementos alimenticios y plantas medicinales, cumpla en lo mayormente posible un plan de nutrición y con esto reduzca el riesgo de enfermedades (más vale prevenir que lamentar).

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